Por: Darío Rosemblat

Nunca vi nada igual. Una serie de ficción futurista mixturada con un documental, pero encima como poniendo como eje central la colonización de Marte. La serie juega perfectamente con todos los trabajos realizados estos últimos años en post de colonizar Marte en un futuro mediato a la par que narra las vicisitudes de una primera avanzada en Marte por parte de una tripulación que planea vivir allí. El juego con el tiempo entre aquel no lejano 2033 y la actualidad es constante. Todo lo que viven esos tripulantes en Marte no es para nada ajeno a todos los trabajos que realizan científicos e ingenieros día a día en estos últimos años, y todo lo que en la parte ficcionada de la sucede está sostenido por el relato de los científicos. Una perla, pero una perla en serio, interesante, dinámica y por momentos atrapante. Véanla en Netflix, una docuserie de las que no hemos visto antes.